Rescatan a dos turistas tras volcar su moto acúatica en Conchal

El Ministerio de Seguridad Pública comunicó que gracias a la oportuna actuación del Servicio Nacional de Guardacostas se logró salvar la vida a dos turistas que sufrieron una emergencia, luego de que se les apagara la moto acuática en la que navegaban.



Los fuertes vientos y el alto oleaje provocaron que la moto de agua se volcara, dejando a la deriva a sus dos ocupantes, quienes estuvieron a punto de perder la vida este domingo al ser las cinco de la tarde, en playa Puerto Viejo de Conchal.

Fue así como se generó un incidente vía  9-1-1, el cual fue atendido por oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas de la estación de Flamingo, Santa Cruz, Guanacaste.

Afortunadamente los guardacostas estaban en una interceptora realizando un patrullaje preventivo en el sector de playa Flamingo, desde donde se trasladaron hasta playa Puerto Viejo.

Cuando los oficiales del Guardacostas llegaron al sector observaron como las fuertes corrientes arrastraban a tres hombres junto con la moto acuática, la cual estaba hundida en un 90%.

Gracias a su constante entrenamiento y preparación, los oficiales se lanzaron al agua para rescatar a los bañistas, dos de ellos vecinos de Cartago, identificados como Carlos Angulo de 41 años y su hijo Jhosua Angulo de 14 años.

El tercero de ellos era un joven de la localidad, quien se lanzó al agua para rescatar a los bañistas, quien no fue identificado, pero las corrientes y fuertes vientos se lo impidieron.

Una vez que los bañistas y el rescatista estaban a salvo en la embarcación del Guardacostas, estos fueron llevados hasta un punto seguro en playa Puerto Viejo.

Pese a que los tres hombres fueron arrastrados por unos 200 metros, fue gracias a los chalecos salvavidas que la situación no se tornó más complicada de lo que ya era, pues mantenerse a flote fue una ventaja que evitó alguna perdida humana.

Al final del suceso los bañistas no requirieron ser traslados a ningún centro médico ni valorados por los cruzrojistas, y solo mostraban gratitud hacia el lugareño que intentó salvarlos, así como también a los guardacostas quienes sin pensarlo dos veces se lanzaron al agua para rescatarlos.