Detienen a dos personas por tráfico de personas en La Cruz

La lucha que libra las autoridades del Ministerio de Seguridad Pública contra los delitos transfronterizos no se detiene. A pocas horas de haber iniciado el año nuevo, oficiales de la Policía de Fronteras detuvieron a los dos primeros presuntos traficantes de personas del año.

 

 

Dichos cumplimientos tuvieron lugar el pasado sábado durante el segundo megaoperativo del año y como parte de  los habituales patrullajes que realiza el citado cuerpo policial para resguardar la soberanía nacional, así como para combatir todo tipo de organizaciones delictivas que operan en la frontera norte.

 

Uno de los detenidos es un nicaragüense de apellido Marenco, quien tiene estatus de residente permanente, el cual estaba transportando a cinco compatriotas suyos que ingresaron a territorio costarricense por un punto no habilitado para fines migratorios aduaneros.

 

Según lo confesado por esas personas, Marenco les estaba cobrando diez mil colones a cada una de ellas para transportarlos en un vehículo desde el portón de la Finca Claudio en Santa Elena hasta el centro del distrito de Santa Cecilia, cantón de La Cruz.

 

Posteriormente, siempre en ese mismo distrito, pero en el sector de Corrales Negros, la Policía de Fronteras interceptó otro vehículo, el cual era guiado por un nicaragüense residente de apellido Blandón, el cual transportaba a otro compatriota suyo, quien había ingresado al país de manera irregular.

 

Dicho nicaragüense indicó que en el lado nicaragüense fue abordado por un sujeto que no conocía, quien le prometió llevarlo hasta suelo nacional por la suma de 35.000 colones donde lo esperaría otro hombre en un vehículo que, por la misma suma, lo llevaría hasta Cañas Guanacaste.

 

 

Tanto Marenco como Blandón fueron aprehendidos y puestos a la orden de la Fiscalía de Liberia, donde podrían ser procesados por el delito de tráfico ilícito de personas, delito que en su forma ordinaria está sancionado con penas de 2 a 6 años de cárcel, mientras que en su modalidad agravada se castiga con penas de entre 3 y 8 años de prisión.

 

Los seis extranjeros que habían ingreso al país de forma irregular, a quienes esos conductores transportaban, también fueron puestos a la orden del Ministerio Público en calidad de testigos.

 

El 2020 cerró con la detención de 70 presuntos responsables del delito de tráfico ilícito de personas, de los cuales 66 fueron detenidos en la frontera norte, 30 de ellos en La Cruz, Guanacaste y 34 en Los Chiles, provincia de Alajuela.